Hada Cautiva

No está atrapada en un lugar físico. Lo que la rodea es un estado mental: el interior de su propia conciencia. Las cuerdas que la inmovilizan no son visibles para otros, porque no están hechas de materia, sino de pensamientos, emociones, y heridas no resueltas.

Está suspendida en un espacio oscuro que no es otra cosa que su propio mundo interior. Aunque tiene alas, no puede volar. Aunque es mágica, no puede avanzar.

Esta mariposa simboliza ese momento de vida donde uno se siente contenido, retenido, sin rumbo claro… y al mismo tiempo, es la prueba de que incluso en lo más profundo de la mente, la belleza y la luz siguen presentes.